No es novedad decir que la mayoría de l@s mexican@s pasamos gran parte de nuestro día en el trabajo (ya sea en remoto o presencial) por lo que tener hábitos saludables dentro y fuera de la actividad laboral no solo es importante, es necesario para tener buena salud y prevenir enfermedades. Si no sabes cómo empezar, ¡estos tips te van a ayudar a hacerlo!
Aunque no nos gusta parecer disco rayado, es importante decirte una vez más que para cuidar tu salud en general lo mejor que puedes hacer es darle a tu cuerpo alimentos de calidad como frutas, verduras, proteínas y alimentos sin procesar. Sí, nos lo han dicho hasta el cansancio, pero aunque usted no lo crea, esto no solo impacta tu salud, también tu productividad y rendimiento en el trabajo. Aquí te va por qué.
La comida es nuestra gasolina porque permite que nuestro cochecito arranque, la cosa es que no todas las gasolinas son iguales. Si no le damos una opción de calidad, el coche puede pararse antes, ir más lento o, incluso en algunas ocasiones, puede que ni arranque. Esto es porque la comida tiene un impacto directo en los procesos cognitivos.
Prácticamente todo lo que comemos se convierte en glucosa, esa maravillosa sustancia que le da energía a nuestro cerebro para mantenerse alerta. Cuando no tenemos suficiente glucosa en el cuerpo nos cuesta mantenernos atent@s y nos distraemos con cualquier estímulo. Por eso si no has comido nada y empiezas a trabajar te cuesta el doble concentrarte.
De igual forma, la comida ayuda a nuestro sistema inmunológico a estar listo para luchar contra cualquier amenaza al absorber los nutrientes de lo que comemos. Si mantienes una dieta balanceada, rica en vitaminas, minerales y baja en grasas te vas a enfermar menos.
Otro tip súper importante y que muchas veces damos por sentado es mover el cuerpo. Ya sea que hagas home office o vayas a la oficina, es muy importante que no te quedes todo el día sentad@ en la misma posición. De acuerdo con un estudio publicado en Medicine & Science in Sports & Exercise, por cada media hora que permanecemos sentad@s, debemos estar al menos media hora de pie para revertir los efectos del sedentarismo.
Por otro lado, mover el cuerpo de forma más aeróbica, o sea hacer ejercicio, tiene muchos beneficios de prevención que no solo te ayudan a tener más energía, también pueden hacer que prevengas enfermedades como diabetes, problemas cardiovasculares y hasta puede funcionar como una vacuna diaria para que ninguna enfermedad se te complique, ¡hasta la gripa! Que no te dé pena pedir espacio para moverte, es por tu salud.
Aunque podría parecer de lo más obvio, ¿has escuchado hablar del presentismo o, en inglés, presenteeism? Se refiere a la necesidad de trabajar aunque estés enferm@ y de acuerdo con World Economic Forum, nada más en Reino Unido 83% de la fuerza laboral aseguró haber visto este comportamiento entre sus compañer@s.
Un dato interesante sobre el presentismo es que es más caro que el ausentismo, para que le digas a tu manager y junt@s hagan conciencia (guiño, guiño). Lo más curioso es que sucede en todos lados, en lugares como Japón el costo de un mal rendimiento debido al poco descanso y a que l@s trabajador@s iban a la oficina enferm@s le costó al país aproximadamente $3,055 dólares por empleado al año.
Aunque queremos pensar que ya aprendimos después de una pandemia, si te sientes mal lo mejor es aislarte y concentrarte en recuperarte al 100%, por tu salud y la de l@s demás. ¡No va a pasar nada si te desconectas unos días! Así te cuidas tú y previenes una cuarentena en tu oficina.
Si trabajas remoto esos días tampoco te forces a trabajar, aunque estés en tu casa prioriza tu bienestar porque a la larga el no descansar y darle a tu cuerpo la posibilidad de mejorarse, solo hará que la enfermedad se quede más tiempo y te tardarás mucho más en regresar a la normalidad.
Pide vacaciones, desconéctate a tus horas y aunque pases la mayor parte del día en cosas del trabajo, no olvides tener un balance saludable entre tu vida profesional y personal. Está comprobado que este tipo de acciones puede evitar el burnout, que a su vez, también puede llevar a enfermedades mentales más complicadas como depresión y ansiedad.
La buena noticia es que tú puedes prevenirlo, solo date el espacio necesario y pide ayuda siempre que lo necesites, una consulta con tu dr/a. de cabecera siempre podrá despejar dudas y hacerte sentir mejor. Si ya tienes burnout, no te preocupes, es más común de lo que crees, 43% de la población de más de 100 países lo ha experimentado y aunque es importante hacer conciencia antes de que suceda, con la ayuda profesional adecuada es totalmente posible superarlo. ¡Ánimo!
En lo que comes, en tu espacio de trabajo, en tus manos. Si estamos limpi@s, ¡estamos san@! Las bacterias y virus viven en todos lados por lo que es importante que verifiques que hasta lo que comes siempre esté súper limpio. Pro tip: Busca siempre el puestito de la calle que veas más higiénico cuando sea tiempo de la garnacha y lávate las manos antes y los dientes después de comer. Sí, los dientes, aunque no lo creas las enfermedades también pueden entrar por la boca. Por ejemplo, si no tienes buena higiene, algunas bacterias pueden moverse de tu boca a tus pulmones y causar enfermedades como neumonía.
El último pero no la menos importante para un cuerpo sano: tomar agua. Sabemos que a veces es complicado porque con los pendientes, las juntas y todo lo que sucede en el día tendemos a olvidarnos de la hidratación pero tomar suficiente agua tiene más beneficios que quitarte la sed. Te ayuda a regular la temperatura del cuerpo, mantener tus extremidades lubricadas, llevarle nutrientes a tus células y en general, hace que tus órganos funcionen mejor. Esto, a la larga, te hará concentrarte bien en el trabajo, estar de buen humor y hasta dormir tus horas.
Otra opción para mantenerte hidratad@, que ojo, no sustituye al agua natural, es tomar té negro por sus grandes beneficios para la salud. De acuerdo con un estudio reciente, esta bebida podría ayudar a protegernos de algunas enfermedades del corazón como la hipertensión e incluso prevenir diabetes gracias a su alto contenido en polifenoles, un fuerte antioxidante que se encuentra en la planta de la que se extrae la infusión. Eso sí, tampoco hay que excedernos, porque el té negro contiene cafeína y aunque también es positiva para la salud, nada en exceso es bueno.
Con esto terminamos los tips oficiales pero dejamos lugar para el pilón y nuestro favorito: para que puedas mantenerte saludable en la vida laboral todos los días y siempre estés tranquil@ de tener con quién contar, te recomendamos referir a tu empresa para que contrate un seguro de salud con nosotr@s.
¡Cuidados médicos mayores, menores y preventivos para todo tu equipo en un solo plan! Además, si tú l@s refieres y se quedan con nosotr@s, ¡hay un premio para ti! Te dejamos toda la información aquí.
Fuentes: