El dolor de cabeza es uno de los padecimientos más comunes en la mayoría de las personas y por el cual muchos pacientes piden atención médica. Pero, probablemente, no estás enterado de que existen diversos tipos de dolor de cabeza, que pueden ser diagnosticados por los síntomas que presenta cada persona.
Sigue leyendo este artículo para que sepas cuáles son las causas, síntomas y qué tipo de tratamiento preventivo puedes seguir para evitar el dolor.
Según un estudio publicado por el Journal off Headache and Pain en el 2022, 52 % de las personas sufre algún tipo de dolor de cabeza al año, por lo que es considerado un trastorno frecuente entre la población a nivel mundial.
Pero, ¿qué es un dolor de cabeza?
Éste se define como una sensación incómoda o dolorosa en la cabeza, que puede aparecer en cualquier momento. Ademas, puede variar en intensidad y duración, desde una molestia leve que se quita rápido hasta un dolor muy fuerte y constante que dura varios días.
Un dolor de cabeza o cefalea puede aparecer en cualquier parte de la cabeza. Puede sentirse en el cuero cabelludo, en la parte superior del cuello, de la cara o al interior de la cabeza.
Aunque normalmente no es grave, en algunos casos no deja de ser preocupante porque interfiere con las actividades diarias de las personas. Por eso, los médicos deben identificar qué tipo de cefalea presenta cada paciente, para así poder indicar el tratamiento adecuado y evitar que sea incapacitante.
Muchas veces los dolores de cabeza se confunden con migrañas,, por lo que es bueno conocer las diferencias, por que estás requieren otro tipo de atención médica.
El dolor de cabeza o cefalea generalmente se presenta en ambos lados de la cabeza y es menos grave que una migraña. Por otro lado, la migraña causa palpitaciones severas, una sensación punzante y dolor más intenso. La mayoría de las veces se siente en un solo lado de la cabeza y puede durar varias horas o, incluso, hasta días.
Por esa razón, ante un dolor de cabeza, el médico tiene que analizar muchos datos, como por ejemplo, si es un dolor permanente o intermitente, la duración y frecuencia de los episodios, las características de los mismos y los factores desencadenantes, ya que las causas pueden ser múltiples.
Como te decíamos, el dolor de cabeza puede estar relacionado a una amplia variedad de factores, los cuales pueden estar influenciados por elestilo de vida que llevamos. Por ejemplo:
Es sabido que el estrés es un desencadenante frecuente de dolores de cabeza y migraña, tanto en adultos, como niños y jóvenes. Si el estrés es permanente a causa de presión laboral o problemas familiares, puede traer como consecuencia tensión muscular y dolor de cabeza tensional, así como producir otros tipos de dolores de cabeza o, incluso, agravarlos.
La fatiga es un trastorno que se caracteriza por presentar cansancio extremo e incapacidad para realizar las labores diarias, debido a la falta de energía. Puede ir acompañada de varios síntomas, pero con mucha frecuencia el protagonista es el dolor de cabeza. Si dura más allá de un mes podría ser algo más gravey lo mejor siempre es consultar a tu doctor de cabecera.
El alcohol es un estimulante que puede favorecer la aparición de dolor de cabeza. Cuando se consume en exceso, el organismo elimina grandes cantidades de agua, lo que produce deshidratación y provoca dolores de cabeza parecidos a una migraña, ésta puede sentirse en ambos lados de la cabeza y se agudiza con el movimiento.
Al igual que el alcohol, la cafeína es un estimulante. Su consumo excesivo, por encima de 400 miligramos o alrededor de 4 tazas de café al día, pueden provocar dolores de cabeza o, en su defecto, las personas que acostumbran ingerir varias tazas al día, alrededor de 200 miligramos diarios, y suspenden su uso, también pueden sufrir de dolores de cabeza parecidos a migrañas por abstinencia.
Las hormonas estrógeno y progesterona regulan muchas de las funciones corporales. La disminución de estrógeno durante el síndrome premenstrual puede afectar las sustancias químicas presentes en el cerebro por lo que puede provocar dolores de cabeza antes, durante o después del ciclo hormonal.
En algunos casos, los dolores de cabeza pueden ocasionar problemas de visión o viceversa, lo que se conoce como migraña retiniana, llamada comúnmente migraña ocular. Ésta consiste en una afección que, además de dolor de cabeza, puede ocasionar visión borrosa, episodios de visión reducida o ceguera de corta duración. Estos episodios pueden llegar antes o al mismo tiempo que el dolor de cabeza.
Los dolores de cabeza frecuentemente están relacionados con la salud bucal y muchos problemas dentales pueden ser causa de los mismos, algunos padecimientos pueden sercaries, maloclusión o mordida defectuosa, molares mal posicionados, rechinar los dientes o enfermedades de las encías. Infecciones como la sinusitis.
Algunos dolores de cabeza son producto de infecciones en los senos paranasales, especialmente los frontales, lo que todos conocemos como sinusitis. Ésta puede sentirse como presión alrededor de los ojos, las mejillas, la frente y hasta como un latido en la cabeza. Lo anterior sucede porque la infección ocasiona que se acumule mucosidad espesa en el interior de los senos paranasales.
La migraña o jaqueca es una afección neurológica causada por cambios en los nervios y vasos sanguíneos. Como te dijimos más arriba, se manifiesta por medio de un dolor de cabeza intenso o grave en toda la zona craneal y puede presentarse en forma de crisis o ataques, ya sea por episodios o de manera crónica.
Frecuentemente, hay personas que manifiestan sentir dolores de cabeza después de una lesión cerebral traumática (LCT), ya sea porque padezcan una fractura de cráneo o porque tengan pequeñas acumulaciones de sangre o líquido dentro del mismo. Los dolores de cabeza podrían iniciar en los primeros días posterior a la lesión y mantenerse por periodos largos.
Los dolores de cabeza pueden tener diferentes orígenes y, por lo que, los síntomas pueden ser diversos.
¡Lo importante es que sepas diferenciarlos!
Desde un punto de vista clínico, los síntomas del dolor de cabeza siempre van correlacionados a una causa específica, la cual debe ser determinada por un médico siempre. Sin embargo, estos son algunos de los más comunes para que los tengas presentes:
Los dolores de cabeza de larga duración son los que se extienden por más de cuatro horas o incluso por varios días, se conocen como dolores de cabeza crónicos. Están dentro de la clasificación de los dolores de cabeza primarios y afectan con frecuencia los dos lados de la cabeza, producen dolor leve a moderado y tienen características similares a la migraña crónica o al dolor de cabeza crónico de tipo tensional.
La sensación de presión en la cabeza comúnmente está relacionada a dolores de cabeza tensionales (TTH, en inglés), o dolor de cabeza por estrés y se siente como una banda apretada que afecta ambos lados de la cabeza. El dolor de un TTH varía de leve a moderado, no es un dolor punzante y puede deberse a tensión muscular, estrés, ansiedad, depresión o mala postura.
El dolor que irradia la parte posterior de la cabeza, incluyendo el cuello y la parte de atrás de las orejas, tiende a ser causado por un dolor de cabeza tensional, migraña o una mala postura. El dolor suele ser leve, sordo, no pulsante, y generalmente no está asociado a padecimientos graves.
Cuando el dolor de cabeza se presenta con síntomas de náuseas o vómitos, puede estar asociado a migrañas causadas por problemas digestivos, uso excesivo de medicamentos (MOH, en inglés) o síndrome de abstinencia a algunos medicamentos o estimulantes. La mayoría de las personas sienten un dolor punzante solo en un lado de la cabeza, aunque a veces afecta los dos lados.
Muchas personas experimentan sensibilidad a la luz y el sonido cuando tienen migrañas. Son las que se conocen como migrañas con aura, que son síntomas de advertencia que se inician antes del dolor de cabeza, acompañados de alteraciones visuales temporales. Inician con un dolor de cabeza intenso con sensibilidad a la luz y el sonido.
Si bien es cierto que la mayoría de los dolores de cabeza no representan signos de preocupación, hay que estar atentos a otras señales de alarma.
¿Cuáles son los síntomas de alerta del dolor de cabeza que pueden requerir atención médica?
Ante un dolor de cabeza fuerte y repentino es urgente que la persona sea asistida de inmediato, ya que es un tipo de dolor de cabeza denominado cefalea tronante, que alcanza su máxima intensidad, aproximadamente, en 60 segundos. Puede deberse a la ruptura de un aneurisma cerebral, lo cual sucede cuando se rompen vasos sanguíneos del cerebro y cortan el flujo de sangre a una parte del mismo.
Cuando el dolor de cabeza se presenta acompañado de fiebre, podría ser signo de algún tipo de infección, como una sinusitis común o, también, de algo más grave, como una encefalitis, que es una inflamación del cerebro. Pero si, además, hay sensación de cuello rígido, se podría sospechar de meningitis, que es una infección bacteriana que inflama las membranas protectoras del cerebro y de la médula espinal. Aunque recuerda, nunca debes de diagnosticarte en internet, ¡siempre ve con un profesional!
Cuando se presenta un dolor de cabeza fuerte y súbito, puede estar en proceso un accidente cerebrovascular, que significa que se detuvo el flujo de sangre a una parte del cerebro. A veces, estos accidentes cerebrovasculares suelen confundirse con migrañas, por lo que son de cuidado.
Como te comentamos antes, existe un tipo de dolor de cabeza conocido como migraña con aura, que produce alteraciones de la visión, como destellos de luz, puntos ciegos e, incluso, pérdida temporal de la visión, los cuales anteceden a una migraña clásica. Pero si son permanentes, pueden conducir a un desprendimiento de retina, por lo que es muy importante que como en todo, mantengas la comunicación con tu doctor de cabecera para que te oriente.
Hay cefaleas que empeoran progresivamente, ya sea en frecuencia o en intensidad. Por ello, un dolor de evolución fuerte y que progresa, requerirá que el médico descarte hipertensión endocraneana, que es una afección que se produce cuando la presión dentro del cráneo aumenta sin motivo aparente, así como descartar tumores cerebrales primarios o abscesos cerebrales.
Clínicamente, los dolores de cabeza se clasifican en primarios y secundarios. Los primarios son los que no están asociados a condiciones médicas. Los secundarios son los causados por lesiones o condiciones médicas o factores que no son tan fáciles de saber, como ya observaste.
Entre los más comunes dolores de cabeza primarios están:
El dolor de cabeza tensional o cefalea tensional es el tipo más común de dolor de cabeza. Genera una sensación de presión alrededor de la cabeza y suele estar relacionado con el estrés, la ansiedad, la falta de sueño, la mala postura y el uso excesivo de pantallas.
Como te explicamos al inicio, la migraña es un tipo de dolor de cabeza intenso y pulsátil que a menudo se presenta en un lado de la cabeza. Los síntomas de la migraña pueden incluir náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y al sonido y visión borrosa. Las causas de la migraña son diversas y pueden incluir desde factores genéticos, cambios hormonales, ciertos alimentos y bebidas hasta relacionarse con los cambios de clima y el estrés emocional.
La cefalea en racimos es un tipo raro de dolor de cabeza, que afecta a menos de 1 % de la población. Se denomina cefalea en racimos porque se presenta en ataques sucesivos, llamados «racimos», en una misma zona de la cabeza o de la cara, con dolor punzante e intenso. Los síntomas de la cefalea en racimos pueden incluir enrojecimiento del ojo, lagrimeo, congestión nasal, sudoración y se cree pueda estar relacionada con una anomalía en el sistema nervioso.
Puede ser causado por la inflamación de los senos paranasales, derivada de una infección, alergias o irritantes ambientales. Se presenta como un dolor en la frente, los pómulos y la nariz. Los síntomas pueden incluir secreción nasal, congestión, fiebre y dolor de oído.
El dolor de cabeza por esfuerzo se produce debido a la tensión muscular en el cuello y la cabeza, la cual puede ser causada por una mala postura, tensión emocional o actividad física intensa, como correr, saltar, levantar pesas u otros. Por lo general son de corta duración, pero a veces pueden durar hasta dos días.
Ahora bien, llegado a este punto, tal vez sientas inquietud por saber qué tipos de tratamiento podrían aplicarse para los diferentes tipos de dolores de cabeza.
¡Te contamos!
Con respecto a este tema, los médicos, y nosotros también, advierten que lo primero que debes tener en cuenta es no automedicarte, ya que podría traer otro tipo de consecuencias.
Por eso aclaran que el tratamiento de este dolor consta de tres aspectos: primero, identificar y evitar los factores desencadenantes, segundo, tratar correctamente las crisis de dolor y, tercero, iniciar un tratamiento preventivo bajo supervisión médica cuando sea necesario.
Sin embargo, para que sepas cuáles son los tratamientos que se aplican, podemos mencionar:
Es conocido que existen múltiples analgésicos simples disponibles sin receta médica, que son los comúnmente usados para reducir el dolor de cabeza. Estos incluyen aspirina, ibuprofeno, paracetamol y naproxeno sódico. Solo no abuses de ellos, porque como todo, tienen efectos secundarios.
La aplicación de calor o hielo en la zona afectada puede ayudar a aliviar el dolor de cabeza tensional. Para aplicarte calor, puedes utilizar una almohadilla térmica a temperatura baja, una botella de agua caliente, una toalla caliente o compresa caliente. Para aplicarte frío, puedes utilizar cubos de hielo envueltos en una toalla, o una compresa de hielo, solo ten cuidado de no lastimar tu piel.
Los dolores de cabeza pueden aparecer en distintas partes de la misma o en áreas próximas, como el cuello o las cervicales. Recibir un masaje puede resultar un alivio para las cefaleas pero siempre hazlo con un profesional. Estas áreas pueden incluir los músculos del trapecio, del cuello y los temporales y frontales, también en la base del cráneo, la parte trasera de la cabeza y los músculos de los ojos y sienes.
Existen diferentes técnicas de relajación que ayudan a combatir situaciones estresantes, lo cual podría ayudar a que tengas menos dolores de cabeza y migrañas. Entre esas están la respiración profunda, la meditación, el tai chi, el yoga, la biorretroalimentación, la musicoterapia o terapia artística, la aromaterapia, la hidroterapia, por dar algunos ejemplos.
Muchas personas que padecen de migraña o cefalea, dicen que ciertos alimentos les empeoran el dolor, por lo que descubrir cuáles son y llevar a cabo una dieta de eliminación de los mismos, podría ser de gran ayuda. Asimismo, mejorar los tiempos adecuados de sueño contribuyen a aliviarlo, ya que tanto un exceso como una falta de sueño pueden ser perjudiciales.
Tanto los métodos tradicionales como los naturales pueden ser eficaces para prevenir y tratar el dolor de cabeza con las debidas indicaciones médicas. Pero también, tener otros hábitos de vida podría ayudarte a prevenirlo.
Los métodos preventivos son una opción natural para cualquier tipo de enfermedad o dolencia, así que si necesitas eliminar los dolores de cabeza para tener calidad de vida, puedes practicar las siguientes rutinas:
La alimentación juega un papel fundamental en la prevención del dolor de cabeza. Precisamente, una serie de alimentos pueden ser desencadenantes del mismo, tales como el queso, el chocolate, el vino tinto, el café y la comida picante.
La deshidratación puede ser un factor que contribuye en gran medida al dolor de cabeza. Para evitar los dolores de cabeza por deshidratación, debes beber suficiente agua a lo largo del día y comer alimentos con alto contenido de agua, como la sandía
Si pasas mucho tiempo sentado frente a una pantalla o en una posición incómoda, puede derivar en dolores de cabeza. Trata de sentarte con la espalda recta y la cabeza en posición neutral, así evitas la tensión en el cuello y los hombros.
El ejercicio regular puede ayudar a prevenir el dolor de cabeza ya que ayuda a reducir el estrés y la tensión muscular.
Por último, la falta de sueño puede ser un importante factor que desencadene un dolor de cabeza y, hoy en día, está muy relacionado con el uso de la tecnología. Trata de dormir al menos 7-8 horas por noche para asegurar que tu cuerpo tenga suficiente descanso.
En conclusión, dependiendo del tipo de dolor de cabeza o cefalea, hay diferencias, por lo que estar pendiente de cada uno de los síntomas que presentes puede ayudarte a prevenir cualquier efecto secundario y, por lo tanto, una enfermedad más grave.
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