¿Estás interesado en contratar una póliza de seguro, pero no comprendes qué es un deducible ni cómo funciona? ¡No te preocupes! Aquí vamos a aclarar las dudas sobre este tema que se suelen presentar en la mayoría de los casos, para que logres identificar cuál es la opción que más te conviene.
Esta es la palabra que en el mundo de los seguros describe algo muy sencillo: la cantidad de dinero que tú le pagas al proveedor del servicio directo antes de que empiece a cubrirte por un accidente, hospitalización o hasta el clásico golpe avisa en un choque.
El deducible es una especie de «mecanismo de defensa» que tienen las compañías aseguradoras para que tú, como asegurad@, te hagas cargo de una parte del riesgo al principio y así ellos no lo asuman hasta que rebases el tope que acordaron en el contrato.
El deducible se aplica en diferentes tipos de pólizas como seguro de automóvil con cobertura amplia, seguro de salud por gastos médicos y seguro de vivienda.
Al momento de contratar un seguro, el monto o porcentaje establecido como deducible influirá en el precio que pagarás por tu póliza.
El monto del deducible se acuerda al momento de contratar la póliza con la compañía de seguros. La cantidad establecida corresponderá al pago que deberá hacer el asegurado en caso de que se presente alguno de los supuestos contemplados según el tipo de cobertura y el rubro de la póliza: en caso de un accidente, percance, pérdida total, gastos médicos, vivienda, robo total, responsabilidad civil, entre otros.
Por ejemplo: si el monto a pagar de un tratamiento es de $15000 pesos y el monto del deducible establecido fue de $5000 pesos, el asegurado deberá pagar $5000 pesos, la aseguradora se encargará de pagar el resto, que serían $10000 pesos.
El deducible del seguro se puede establecer por un monto específico o un porcentaje del monto total de la póliza de seguro contratada. Es posible que la cantidad de dinero a pagar varíe según la compañía. Cuanto más alto es el deducible, menor es el pago de la prima.
En caso de necesitar hacer uso de tu póliza de seguro, lo más recomendable es que contactes a un ajustador o broker para que te asesore sobre los procedimientos a seguir.
Si el costo de los daños sobrepasa el valor del deducible establecido, el asegurado paga el deducible y la aseguradora el resto. En cambio, si la reparación de los daños o los gastos son menores al monto del deducible, la compañía de seguros no se hará responsable.
Un ejemplo: si al contratar una póliza de seguro de auto se estableció que el deducible era de $10000 pesos y los daños son de $9000 pesos, la totalidad debe ser asumida por el asegurado.
Al contratar una póliza de seguro puedes escoger entre un deducible alto y un deducible bajo. ¡El mejor deducible será el que se adapte a tus necesidades!
Cuando el deducible de tu seguro es alto, la prima mensual o el costo de la póliza de seguro va a disminuir. Por una parte, esto es beneficioso si deseas contratar servicios adicionales. La desventaja es que, en caso de algún siniestro o accidente, deberás pagar más. Incluso, corres el riesgo de que al tratarse de un evento menor, el costo del deducible sea más grande que los daños a cubrir y deberás pagar la totalidad de los gastos.
Cuando el deducible es bajo, el costo del seguro es más alto. Es decir, que el precio total que deberás pagar será mayor. La ventaja de este tipo de deducible es que, en caso de presentarse algún suceso pequeño, la compañía de seguro cubrirá la mayoría de los daños materiales o gastos.
En algunos casos, las empresas que trabajan en alianza con la aseguradora le permiten al asegurado pagar el deducible con tarjetas de crédito o por partes. Esto es de gran ayuda si no cuentas con el dinero en el momento.
Esta decisión se basa en las necesidades o la situación financiera que tengas. Cuando contratas un seguro con deducible, el valor de la póliza puede bajar de manera considerable debido a que asumes parte de la responsabilidad en el monto a pagar. Esto puede ser perjudicial si el valor de los daños es menor al deducible establecido.
Al contratar un seguro sin deducible, el precio de la póliza será más elevado. Sin embargo, la aseguradora se hará responsable en caso de cualquier daño que presente el bien asegurado, por más bajo que sea, siempre y cuando esté contemplado dentro de la póliza.
Sí, claro, lo único que cambia es el precio. En Sofía, no tenemos deducible, lo que significa que empezamos a cubrir desde el primer peso que necesites, no importa si son medicamentos, una consulta con un especialista o hasta una hospitalización.
La única diferencia es que el costo de la póliza es un poco más alto a lo que pagarías por un seguro que sí tiene deducible, esto es para que podamos asumir el riesgo de cubrirte desde el principio por la suma asegurada que contrataste y tú no tengas que preocuparte por «llegar a una cantidad» en un momento complicado y estresante.
En realidad, todo se resume a lo que tú estás buscando en un seguro médico. Si lo que quieres es pagar una prima más pequeña, pero si llegas a necesitar tu seguro no te importaría pagar, por ejemplo, $50000 pesos de deducible antes de que te empiecen a cubrir, puedes optar por una cobertura con deducible que te cubra solo gastos grandes.
Si lo que quieres es un seguro que te proteja desde el inicio, puedes invertir un poco más en el precio de la prima y así estarás cubierto desde una gripe hasta una hospitalización y no conocerás nunca el deducible.
Como todo en la vida, el tema del deducible depende de lo que tú necesitas, pero eso sí: si quieres una cobertura completa sin preocuparte por llegar a un tope para compartir los gastos con tu aseguradora, un seguro sin deducible es 100 % necesario.
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